CONCLUSIÓN
El éxito de la puesta a punto de un perro de protección en el rebaño
demanda tiempo y paciencia.
El buen funcionamiento del perro exige que esté completamente
integrado al rebaño.
Uniendo el perro exclusivamente al rebaño, tendremos todas las
garantías para que pueda ejercer su función protectora, únicamente
sobre las ovejas y no sobre un territorio, casas o personas.